En la noche de ayer noche me vino la tal pregunta, a falta de luz eléctrica, imagino, por los aires muchos de los eolos mofletudos de la región menos transparente del aire. Casi seis horas sin energía eléctrica [se fue la luz, le dice uno a los niños, y alguno cercano preguntó ¿a dónde?, así ayer, ¿a dónde se fue la luz, que no es luz, sino pura y llana y fluida electricidad? ¡Ay! los electrones que no llegan]
Pero la pregunta me ronda. ¿Qué compramos cuando compramos un libro?
Compramos:
ResponderBorrar1) Una etiqueta que dice: "Aléjese de este misántropo".
2) Un discurso al que, con mayor o menor fortuna, le extraeremos apenas unas cuantas frases para incorporarlas al nuestro.
3) Una tarjeta de presentación, ampliamente pública, de nuestras filias.
4) Una gozosa taquicardia (salir a la calle con un libro recién adquirido es uno de esos placeres para lo que no hay palabras).
5) Una herramienta para desprender las manecillas del reloj.
6) Una caja con palabras distinta a todas las que tenemos (así como no hay dos platos de sopa de letras iguales, no hay dos libros idénticos... salvo los abiertamente plagiados).
7) La restauración de la Biblioteca de Alejandría: los muertos reviven y las palabras congeldas en el olvido vuelven a iluminarse.
Saludos.
Compramos unas vaciones de nosotros mismos
ResponderBorrarYo compro mi fuga momentánea a otra realidad, tanto por la historia como por las sensaciones.
ResponderBorrarCompro -muchas veces- inspiración. Confieso que tambien veo en un libro un objeto de placer (amén del diseño)
¡Saludos!
Compro la vida de otra persona...
ResponderBorrarCompro la máxima intimidad de una persona...
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